El empresario colombiano Jaime Esparza es un claro ejemplo de que los sueños y metas se pueden cumplir, no obstante, es importante tener claridad en que a cada plan o proyecto de vida se debe dedicar el tiempo suficiente para que se lleve a cabo de la mejor manera.
El afán y la impaciencia se vuelven los peores enemigos de los emprendedores; los llevan a tomar decisiones de manera apresurada y a cometer errores innecesarios. Lo anterior se puede evitar al analizar cada paso a seguir y al anticiparse a los escenarios poco favorables que se puedan o no presentar.
“Todos queremos ver nuestros sueños hechos realidad en el menor tiempo posible, sin embargo, todo tiene su turno y no podemos apresurar el éxito de un proyecto si queremos mantenernos vigentes en el mercado”, asegura Esparza Rhénals.
Sin duda, contar con la paciencia y dedicación para llevar a la cima un proyecto no es fácil, no obstante, se debe ser paciente y constante para culminar todo de una manera satisfactoria.
“Apresurar el avance de un proyecto puede causar el fracaso de este, el resultado de los negocios depende directamente del tiempo que le dediquemos y trabajemos en pro de resultados y avances que se verán reflejados en nuestro posicionamiento”, son las palabras de Jaime Esparza Rhénals.